Pues sí, me he sentido más frágil que nunca. Por momentos me siento tan necesitada, tan vulnerable. Y cuando imagino que mis pilares se colapsan me inunda un miedo indescriptible, un miedo que me paraliza, un miedo que no me deja parar de sollozar.
Esta vez tengo miedo, mucho miedo. Y me siento tan frágil...
Gracias por tu corazón (y oído) sensible para elegir estas canciones, y gracias por compartirlas conmigo. Fue un hermoso regalo de cumpleaños.
Aquí una probadita...
Pedro Guerra, "Cuando Pedro llegó"
¡Qué insoportable es ser yo misma en días como hoy!
Qué insoportable es no saber qué quiero ni qué me vendría bien...
Qué insoportable es saber que hay algo que me incomoda, y no poder descifrar ninguna señal para saber qué me pasa.
Qué insoportable es querer todo y nada a la vez.
Qué insoportable es poner cara de "fuchi" a todo y a todos.
Qué insoportable es estar tan extremadamente sensible.
Qué insoportable es odiar el calor, y el frío, y lo dulce, y lo salado, y el silencio, y los sonidos, y la indiferencia, y el contacto.
Qué insoportable es saberme una pésima compañía para los demás (y necesitarlos tanto).
Qué insoportable es ser tan, pero tan insoportable...
